Tras el colapso de la Unión Soviética a finales de los 80,
Rusia y Tadjikistán llegaron a un acuerdo para que la frontera afgana, muy
utilizada por los traficantes de droga, fuera vigilada por la guardia
fronteriza rusa.
El Volkosoby es una nueva raza de perros lobo, que el
Ejército Ruso comenzó a criar por el año 2000 en el Instituto de Tropas
Internas de Perm, para vigilar las fronteras con China y Mongolia; uno bien
entrenado está valorado en 2000 – 3000 dólares. Son animales poderosos, con el
tamaño y la fuerza de un lobo, pero con un carácter obediente y amigable hacia
las personas que no suponen ninguna amenaza. Sin embargo, no se venden como
mascotas; sólo las Organizaciones de Seguridad Interna rusas pueden usar en
régimen de alquiler estos animales.
Hubo con anterioridad un intento de cría en la Universidad
de Colonia, pero se consideró un experimento fallido, ya que los perros lobo
obtenidos (más de 200) mostraban un miedo extremo hacia el ser humano, rasgo
típico de los lobos. Por ello, los perros lobo criados en Perm resultaron un gran
éxito y una grata sorpresa; ello fue posible gracias sobre todo a la hembra de
lobo utilizada en la crianza, excepcionalmente sociable y amistosa con los
seres humanos.
Fue la propia loba la que escogió a su compañero, a pesar de
haberse hecho artificialmente una selección de pretendientes, y el cruce dio
como resultado unos perros policía únicos, con una gran inteligencia y unos
mejorados instintos lobunos.
En la crianza del Volkosoby se utilizó al lobo del mar
Caspio o del Cáucaso, oficialmente conocido como lobo de la estepa (Canis lupus campestris), clasificado en
1904 por el científico ruso Iván Dwigubski. Se trata de una subespecie
considerada dentro de los lobos grises y su área de distribución original
abarcaba los países cercanos al mar Caspio y al mar Negro, aunque actualmente
sólo se encuentra en regiones remotas del suroeste de Rusia, bordeando la mitad
norte del Caspio; también ha sido visto en el norte de Afganistán e Irán y,
ocasionalmente, en las regiones esteparias de Hungría y Rumanía.
El lobo de la estepa tiene un peso de 35 – 40 kg. y es de
pelo corto, con una variedad de tonos que giran en torno al gris, con zonas de
color herrumbre y algunas capas marrones y negras en la espalda; es característica
de esta raza una cola poco poblada. Los lobos de Asia y Kazakhstán suelen tener
una coloración más rojiza, muy apropiada
para el camuflaje en las zonas desérticas que suelen habitar. Son más pequeños
que el lobo euroasiático (usado para la crianza del perro lobo checo) y tienen
un pelaje más escaso, erizado y corto.
El perro lobo ruso puede realizar una gran variedad de
tareas especializadas: detección de minas, técnicas de detección de alcohol y
drogas, etc. Cada puesto de control suele estar dotado de 3 o 4 perros lobo
rastreadores; el Cuartel General de la Guardia Fronteriza es el que debe
asegurar que haya suficientes perros lobo adiestrados para cubrir la totalidad
de los
puestos fronterizos.
Si hablamos de cualidades, un pastor alemán, tarda unos 4
minutos en olfatear un supuesto criminal escondido; los perros lobo tardan sólo
15 – 20 segundos. A los perros policía les suele gustar corretear por diversión
en los campos de entrenamiento antes de comenzar su labor; sin embargo, los
perro lobos rusos no pierden el tiempo y van directamente a la tarea. Un
círculo del área en cuestión para establecer posiciones adecuadas es todo lo
que ellos encuentran necesario para, de una manera rápida y sensata, localizar
las drogas, criminales o explosivos escondidos. Además, se ha comprobado que el
perro lobo ruso posee una gran habilidad para la búsqueda y captura de intrusos
y, contrariamente al pastor alemán, puede rastrear fácilmente criminales en carrera durante 2 días sin cansarse.