Muy buenos días a todos.
Hace poco, hablando con unos compañeros, nos preguntábamos hacia donde se encamina la conservación del lobo. Y en ese momento me vino a la cabeza la película que comparte título con esta entrada, pues la situación es bastante parecida. Os cuento un poco por encima, para no chafaros la historia.
Denver, ciudad minera. Se aproxima un duro invierno y los mineros descubren que no tienen provisión de whisky. Tras la visión de un iluminado hacen un pedido de varios carros, conducidos por carreteros irlandeses, que serían acompañados por la caballería, comandada por un soberbio Burt Lancaster. De momento, todo normal. La cosa se complica con la aparición de un grupo de mujeres prohibicionistas ( sí, amigo lector, en aquellos tiempos ya había Maripuris empeñadas en imponerle a todo el mundo cómo tiene que vivir...)y para ponerle más picante al asunto, irrumpe una partida de guerreros indios amigos del morapio. Hasta aquí puedo leer. Demasiados intereses, opuestos entre ellos, pero lo único claro es que el whisky va a acabar mal. Lo mismo que está pasando con el lobo en nuestros días.
Maripuris en pie de guerra. |
El lobo ha sido muchas cosas. Maestro del hombre primitivo, animal sagrado de los pueblos de Celtiberia, símbolo de Roma, la representación del maligno en la Edad Media, la Bestia, devorador de niños, pesadilla de los rebaños, el malo de los cuentos...hasta la llegada de Félix Rodríguez de la Fuente, que nos enseño que el lobo ni es tan malo como lo pintan, y que bien merece un sitio para vivir en paz en nuestra piel de toro. Pero hoy en día, el lobo significa muchas más cosas, y muchas de ellas nada buenas. Arma electoral para políticos mediocres, cortina de humo para pelotazos ecoturísticos y jugadores de ventaja, chivo expiatorio de nefastas políticas agrarias y banderín de enganche de todos los radicales ultra-animalistas, que no han visto un lobo en su condenada vida, ni lo verán. Para nosotros, al igual que para una inmensa mayoría de la gente, una joya de nuestro patrimonio, tanto biológico como cultural. Joya que defendemos desde el respeto, el diálogo y la honestidad.
Ahora bien: ¿ Cuál es la situación real del lobo y qué hay de cierto y de artificio en el creciente conflicto social que rodea a la especie?
CONTINUARÁ...
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